Ley de bancarización minera: Colombia avanza en la lucha contra el lavado de activos y la financiación del terrorismo.
El lavado de activos y la financiación del terrorismo son un tema de preocupación mundial ya que permea diversos sectores económicos.
En especial, aquellos que han quedado al margen de la formalización; constituyendo un problema de seguridad para los países comprometidos con el fortalecimiento de economías legales y transparentes.
Las regulaciones que permiten formalizar cada vez más eficientemente las actividades económicas y comerciales contribuirán de forma gradual a cerrar la brecha a capitales ilegales que buscan inundar la economía formal a través de prácticas confusas que dificultan la vigilancia de los entes en la materia.
Por ejemplo, el sector de minería de subsistencia en nuestro país que no ha contado con los procedimientos que permitan trazar el destino final del oro, así como la procedencia lícita o ilícita del mineral.
En ese sentido, es una buena noticia para Colombia la aprobación de la nueva Ley 2177 de 2021 de bancarización minera; promulgada el pasado 30 de diciembre, que permitirá que este sector económico que históricamente ha tenido un alto porcentaje de informalidad tenga acceso a los
Servicios y productos financieros, tales como:
- Créditos hipotecarios.
- Créditos de libre inversión y leasing habitacional.
- Cuentas de ahorro.
- Cuentas corrientes y tarjetas de crédito.
Lo que redundará en transacciones más seguras y transparentes, evitando el lavado de activos de capitales ilícitos que se aprovechen las carencias de pequeños y medianos mineros.
Por ende, no solo significa que el sector económico experimentará en el mediano plazo un impulso a su productividad; al contar con herramientas financieras a su disposición para mejorar sus condiciones actuales.
También, lo someterá a evaluaciones en materia de prevención del riesgo de lavado de activos y financiación del terrorismo; que permitan a los entes reguladores conocer y documentar las prácticas del sector; logrando así identificar y judicializar aquellas relacionadas con la incorporación de capitales ilegales.
La legislación se propone un ambicioso plan de brindar capacitación y asesoría a sectores de la minería de subsistencia que les facilite el tránsito a la formalización de las transacciones que fomente una minería legal, con enfoque empresarial, responsable, competitiva, influyente y confiable.
Todavía quedan algunos retos por superar, como la estigmatización que sufren los mineros en el sector financiero, para lo cual, la legislación establece que aquellos que sean rechazados por la banca encontrarán puertas abiertas en el Banco Agrario.
Para terminar, el país avanza en la disminución de la desigualdad; permitiendo a los mineros colombianos obtener productos y servicios financieros que les permitan invertir en sus proyectos de manera segura.
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